Kiko Rivera revienta la gran mentira de Isabel Pantoja: así encontró las pertenencias ‘robadas’ de Paquirri
El hijo menor de Paquirri ha vivido una de sus noches más duras tras salir a la luz que la tonadillera lleva 36 años 'ocultándole' dónde se encuentran los bienes de su padre.
Kiko Rivera ha vivido su noche más dura. Reproches, confesiones y una herencia que sigue en el punto de mira y que tiene dividido al clan Pantoja-Rivera. El especial emitido en Telecinco, ‘Cantora: la herencia envenenada’ ha dado para mucho. Las duras y sobrecogedoras declaraciones de Kiko Rivera han dejado sin palabras tanto a los colaboradores como al presentador, Jorge Javier Vázquez. Sin lugar a dudas, hay una fecha, en concreto el 2 de agosto de este mismo año que fue el detonante para que el DJ cambiara su percepción de la historia que siempre le había contado su progenitora sobre las pertenencias de su padre. Él no puede desvelar lo ocurrido, tal y como dicen sus abogados, pero es el presentador quien da a conocer el secreto más oculto de la tonadillera.
Kiko Rivera en su entrevista más sincera en el especial ‘Cantora: la herencia envenenada’./Telecinco
Aquel día de verano Kiko Rivera descubrió que las cosas de su padre estaban en una habitación de Cantora que siempre estaba cerrada. «Sigo en shock», asegura el protagonista de esta historia. En su día presuntamente se denunció el robo y por ese motivo, sus hermanos, Francisco y Cayetano Rivera no pudieron recibir lo que les correspondía de la herencia de su padre. A los pocos días del brutal hallazgo, el marido de Irene Rosales dio a conocer a los toreros lo que había descubierto. 36 años después sale a la luz una de las mayores ‘tapaderas’ que la intérprete de ‘Marinero de luces’ tenía bajo llave. «Mi madre seguía con su historia cuando hablé con ella. Yo todas las veces que había entrado ahí no había nada», ha confesado Kiko, dando por finalizada la relación con su madre.
Kiko Rivera desolado tras confesar Jorge Javier que las pertenecias de ‘Paquirri’ seguían estando en ‘Cantora’./Telecinco
Tras su entrevista más dura, Kiko Rivera ha roto ha llorar tras la llamada de su hermano Francisco Rivera. «No soy muy dado a estas cosas», ha comenzado diciendo visiblemente emocionado el torero. «Por favor, hermano, no cuentes lo que te he contado», intervenía Kiko Rivera. «Solo llamo para decirte que siento muchísimo el dolor que estás pasando porque yo he sufrido mucho», termina confesando el marido de Lourdes Montes. Durante el instante de la llamada se ha podido ver cómo los hermanos abren las puertas a una nueva relación mucho más cercana que no han podido tener debido a lo que decía Isabel Pantoja a su hijo desde que era niño.
«Me he pasado toda mi vida pensando que mis tíos no me querían y que mis hermanos no me querían verme», ha contado dolido el DJ. Además de los problemas personales y el distanciamiento que ha tenido con sus hermanos y la familia de su padre, hay una propiedad que ha sembrado la discordia y que ha provocado que el hermano de Isa P haya investigado sobre la vivienda en la que vive actualmente su madre con su hermano Agustín.
Kiko Rivera en el especial ‘Cantora: la herencia envenenada’./Telecinco
Kiko Rivera se remonta a 1986 para contar lo que ocurrió cuando él tan solo tenía dos años. Lo ha hecho con una carpeta llena de información y documentación relevante sobre lo acontecido recientemente sobre la vivienda. En esos papeles queda reflejado que Isabel Panotoja creó una entidad, ‘Cantora S.A.’, con la que pidió una hipoteca de 50 millones de pesetas pese a que por aquel entonces la finca Cantora «no era de nadie». Esto ocurre así porque en esos momentos, aunque Paquirri dejó la finca a su hijo, la repartición aún no se había hecho efectiva. «Mi madre en ese momento estaba pidiendo dinero poniendo como aval un bien que no era suyo, algo que moralmente es muy reprobable hacérselo a un hijo», ha recriminado Kiko Rivera.
Dos años después, en 1998, la artista pide 35 millones más de las antiguas pesetas poniendo como aval a Cantora, una propiedad que antiguamente era una agrupación de nueve fincas menores. Una vez en 2002, cuando Kiko tenía 18 años, su madre vuelve a rehipotecar la finca por un valor de 2 millones 700 mil euros, pero con una nueva entidad y con el apoyo de su tío Agustín y de su abogado, Ramón Calderón. «Mi madre me ha tenido hipotecado desde que tengo dos años (…) Aunque yo no soy deudor, mi madre ha estado beneficiándose de un bien que era mío, una finca que cuando mi padre murió era un conjunto de 9 fincas y de las que ahora solo hay 6, ¿dónde están las otras tres?», ha preguntado el hijo de la tonadillera.
Ha sido una noche de confesiones en las que Isabel Pantoja no ha querido ser partícipe, a diferencia de lo que ocurrió hace tres semanas en ‘Sábado Deluxe’ donde toda esta guerra entre madre e hijo comenzó…